Desde hace años, los investigadores tratan de dar respuesta a un hecho científico, ingerir menos calorías (hasta cierto punto) significa vivir más años. Son muchas las especies animales de nuestro planeta que logran aumentar su esperanza de vida reduciendo la ingesta de calorías hasta en un 60% y llegando a la misma línea fronteriza de la desnutrición.
Un equipo de investigadores del Buck Institute for Research on Aging ha llevado a cabo un experimento con moscas de la fruta que lo vuelve a confirmar. El estudio ha sido publicado en la revista Cell Metabolism.
En el experimento, las moscas que vieron reducida la ingesta de proteínas en su dieta diaria, aumentaron la capacidad de los relojes circadianos y también mejoró su ciclo de descomposición y síntesis de materia grasa. Y cuando interrumpieron el reloj biológico de las moscas, tanto genéticamente como por factores externos (sometiéndolas a la luz continuamente), descubrieron que los beneficios de la restricción calórica desaparecían.
Estas conclusiones podrían desembocar en el desarrollo de un fármaco futuro que favoreciese este efecto beneficioso de la restricción calórica en nuestro reloj biológico sin la necesidad de hacer una dieta severa.
Imagen | tdlucas5000
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